Melon, Cucumis melo en general

Cucumis melo

El Melón combina la alta temperatura, alta luminosidad y baja humedad relativa.

Temperatura - La temperatura es el factor principal que afecta el clima de los cultivos de melón, la germinación de las semillas y la calidad del producto final. Para una buena productividad el cultivo necesita temperaturas elevadas en el rango de 25 ° C a 35 ° C, a lo largo de su ciclo de desarrollo.

La pulpa del melón, cuando la temperatura aumenta, dentro de ciertos límites, se vuelve más dulce y su maduración es más rápida y completa. A bajas temperaturas (15 ° - 20 ° C), la ramificación del melón se ve afectada resultando en plantas poco desarrolladas y baja productividad.

Sin embargo altas temperaturas por encima de 35/40 ° C y las temperaturas por debajo de 12ºC son perjudiciales.

Brillo - La intensidad luminosa es otro factor climático que influye en el cultivo de melón. Cuando la temperatura no es óptima, la tasa de crecimiento de la hoja se determina por la intensidad de la luz. La reducción en la intensidad de la luz, o el acortamiento del tiempo de iluminación, determina un área de la hoja más baja y menos producción de fruta.

RH - El rango óptimo de humedad relativa para el desarrollo de melón se encuentra 65% a 75%

La humedad del suelo - El melón es una planta considerada poco exigente de humedad del suelo, pero requiere un suministro adecuado a su desarrollo vegetativo completo. Los rendimientos más bajos se obtienen en condiciones de estrés hídrico. Sin embargo, es importante señalar que tanto el exceso y la falta de humedad en el suelo afectan a la fisiología de la calidad de la planta y frutas. Por lo tanto, las altas temperaturas asociadas con alto brillo, baja humedad relativa y adecuada humedad del suelo, proporcionan las condiciones climáticas necesarias para el buen rendimiento de los cultivos y obtener frutos de buena calidad (aumenta el contenido de azúcar, mejor aroma, sabor y la consistencia de las frutas).

Temporada de siembra
La época de siembra más adecuada es aquella en la que, a lo largo del ciclo de cultivo, hay condiciones climáticas favorables. Para cada región, estas condiciones pueden ocurrir en diferentes épocas del año, de acuerdo con su ubicación y altitud. En general, en climas fríos, la plantación del melón se realiza de octubre a febrero; en el clima templado, de agosto a marzo y en climas calientes, todo el año. A modo de ejemplo, en la región del Valle de San Francisco, la  plantación del melón se puede hacer durante todo el año. Se debe evitar, sin embargo, los tiempos de fuertes lluvias.

SUELO
El cultivo del melón se adapta a diferentes tipos de suelos, pero no crece bien en tierras bajas húmedas, con mal drenaje, y los tipos de suelo muy arenosos y poco profundos. El sistema de raíces del melón es generalmente superficial, pero en suelos profundos y bien aireados, alcanza profundidades de hasta 1 metro. Por lo tanto, se debe preferir a la tierra con buena exposición al sol, mediante la selección de la tierra fértil, de 80 cm o más profundo, de textura media (franco arenosa o arcilla arenosa), con buena porosidad, lo que permite un mayor desarrollo el sistema radicular, mayor infiltración de agua y drenaje fácil.

FERTILIZANTES

Los fertilizantes minerales más utilizados son las fórmulas comerciales, como el  sulfato de amonio (20% N), urea (45% N), superfosfato simple (18% de P2O5), superfosfato triple (42% P2O5), cloruro de potasio (60% K2O) y sulfato de potasio (50% K2 O)

PLANTACIÓN
El cultivo se puede establecer a través de la siembra directa principalmente o mediante el trasplante de las plántulas de melón producidas en recipientes adecuados, tales como bandejas de espuma de poliestireno, bolsas de plástico o vasos de papel. Las cucurbitáceas en general no toleran la formación de "raíz desnuda". Se debe tener cuidado de no pasar el tiempo exacto del trasplante, que no exceda el periodo de emisión de la primera etapa de la hoja (15 días después de la siembra). Vale la pena señalar que la siembra directa en el campo anticipa el ciclo del cultivo en comparación con las plantas de semillero,

ESPACIO
En áreas pequeñas, se utiliza, por lo general la separación de dos metros entre filas y 0.30 a 0.50 metros entre plantas

RIEGO
El cultivo del melón es muy exigente en agua y su abastecimiento debe hacerse en el momento adecuado, en busca de altos rendimientos y buena calidad de la fruta, no es muy tolerante a la humedad alta, o la presencia constante de agua en los tallos y las hojas.

La frecuencia de riego y el volumen de agua utilizada para el riego varían con el tipo de suelo, las condiciones climáticas, la variedad y la etapa de desarrollo del cultivo. Por lo tanto, en suelos arenosos, se recomienda que el riego sea diario o incluso dos veces en el dia, mientras que en suelo arcilloso,  se puede aplicar una vez cada dos días por lamina de agua.

Protección de los frutos
Es una práctica común. Consiste en proteger la fruta con dos piezas de bambú, paja o hierba seca, por lo que no hay contacto directo de la fruta con el suelo, evitando la pudrición de ellos (sobre todo en la temporada de lluvias, la siguiente fase de la cosecha), como resultado de las plagas tales como barrenero de perforación y el de las Cucurbitaceae.

FUENTE: Cultivo el Melon, Nilvado Duarte Costa: